7 diferencias clave que debes conocer entre una cuenta de ahorros y una cuenta corriente




Todos tenemos metas y objetivos financieros distintos que se adaptan a nuestros planes de vida, posibilidades de pago y a los conocimientos financieros con los que contamos. Por eso, necesitamos diferentes herramientas y productos que nos permitan llevar a cabo todos los proyectos que nos proponemos.

En muchas ocasiones, cuando necesitamos abrir una cuenta bancaria, no tenemos claridad sobre las características de cada tipo de cuenta que existe y probablemente seleccionamos una que no responde realmente a nuestras necesidades.

Por eso, en EconoMÍA te mostraremos algunas de las diferencias más importantes que existen entre una cuenta de ahorros y una cuenta corriente, dos de los productos financieros más comunes. De esta manera, podrás elegir el producto que te brinde los beneficios adecuados y te ayude a alcanzar todas tus metas. 


1. El propósito que tiene cada tipo de cuenta

  • Una de las diferencias más importantes que existen entre estos tipos de cuenta es para qué vas a usarla. Si tu meta es guardar tu dinero, ahorrar en costos y al mismo tiempo generar rentabilidad sobre los recursos depositados, lo que buscas es una cuenta de ahorros.
  • Por el contrario, si lo que necesitas es un producto transaccional para la administración de tus recursos que te permita tener liquidez adicional, una cuenta corriente funcionará bastante bien para ti.

2. Los medios que puedes utilizar para hacer uso del dinero que tienes en tu cuenta

  • La tarjeta débito es un medio de pago común para las cuentas de ahorro y corriente. Con ella puedes ahorrar en comisiones al realizar compras en tiendas físicas o virtuales. Adicionalmente, puedes disfrutar de descuentos en algunos establecimientos comerciales.

Adicional a la tarjeta débito, la cuenta corriente se utiliza con chequera. Con este medio de pago, puedes realizar un seguimiento riguroso a tus transacciones más importantes.

3. Los costos administrativos que generan

  • Hay que tener en cuenta que algunos productos financieros o servicios generan costos, bien sea por el manejo de los productos o por realizar transacciones, y que estos varían según cada entidad bancaria. Por ejemplo, en el caso de las cuentas corrientes es usual enfrentarse a comisiones por transacciones y costos por la entrega de la chequera. Por otro lado, con una cuenta de ahorros las transacciones y los retiros suelen tener descuentos específicos que facilitan el ahorro, como transacciones digitales gratuitas, inscripción de pagos en línea sin costo, consulta de saldo a $0, entre otros.

4. Los datos que necesitas para abrir tu cuenta

  • Es importante que conozcas qué te piden al momento de sacar una de estas cuentas, para evitar trámites innecesarios. Por ejemplo, muchas cuentas de ahorro están diseñadas para personas que están iniciando su vida financiera y aún no cuentan con ingresos fijos. Entonces, según el tipo de cuenta que solicites, necesitarás únicamente tus datos personales, como cédula, dirección de residencia, número de celular, entre otros.

En cambio, para solicitar una cuenta corriente necesitarás más documentos, ya que usualmente estas son utilizadas para hacer transacciones que requieren un respaldo, a través de un cheque o de un cupo de sobregiro. Esto implica que las entidades financieras deben solicitarte documentos para el análisis de crédito. Si eres independiente, necesitarás algunos documentos que constaten tus actividades laborales como certificado de existencia y representación legal expedido por cámara de comercio, copia de declaración de renta, extractos bancarios, entre otros.

5. Los montos solicitados para adquirir tu cuenta

  • Para una cuenta de ahorros, dependiendo la entidad financiera, no es necesario tener un monto mínimo de apertura. Con una cuenta corriente sí necesitas tener un monto específico de acuerdo con el banco en donde la solicites.


6. La posibilidad de sobregiro

  • Una cuenta corriente, a diferencia de una cuenta de ahorros, te brinda la posibilidad de realizar sobregiros. ¿Qué significa esto? Pues bien, puedes solicitar una especie de préstamo en el que tu banco gira un determinado monto a la cuenta, aunque esta no tenga fondos. Esta modalidad funciona bajo la promesa de que el propietario de la cuenta deposite el dinero nuevamente dentro de un plazo no mayor a 30 días calendario.


7. La posibilidad de cobrar tus cheques sin confirmación

  • Esta es una característica particular de las cuentas corrientes y es conocida como sobre canje. Esto quiere decir que tienes la posibilidad de recibir dinero sobre los cheques que te han consignado sin necesidad de una confirmación previa por parte de la entidad financiera que realizó el giro. Recuerda que, dependiendo del monto, sí se necesita dicha confirmación.

Ya sea que escojas una cuenta de ahorros o una cuenta corriente, recuerda analizar detalladamente para qué la vas a usar, cuáles son las metas que te ayudará a conseguir y cuáles son los beneficios que te brinda.
 
 



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